Hace ya un tiempo que hablábamos de los malos hábitos de conducción. Ser buen conductor empieza por eliminar estas conductas a la hora de conducir, pero hay mucho más… ¿Cómo saber si eres buen conductor?
Como expertos chóferes en Barcelona, para saber si eres buen conductor no tienes más que contestar a estas preguntas. Los síes significan que eres buen conductor. Los noes, que debes mejorar ese aspecto para llegar a serlo.
¿La conducción, sobre todo en trayectos largos, implica para ti algo más que sentarte al volante?
Conducir no es, como decimos, sentarnos al volante, ¡y ale! Es importante conducir estando desansado. Prepararse si se tiene un viaje al día siguiente o, simplemente, no coger el coche si andamos somnolientos, cansados, irritados, etc.
Del mismo modo, si estás haciendo un viaje largo, debes cuidarte parando a descansar, tomando una bebida fresca, estirando las piernas y picando algo.
¿Preparas tu coche para conducir?
Cuando haces viajes debes preparar adecuadamente tu coche. Esto implica revisar líquidos, neumáticos, batería, frenos…
Del mismo modo, tienes que llevar el coche a revisión cuando corresponda y hacerle todos los arreglos recomendados para que la conducción sea óptima, empezando, por supuesto, por tener la ITV al día.
¿Tienes malos hábitos de conducción?
Como anunciábamos al principio, ya hablamos una vez sobre las prácticas de un buen conductor en relación a su vehículo.
Si tienes algún mal hábito en la conducción como apoyar la mano en la palanca de cambios o el pie en el embrague, no vigilar la presión de los neumáticos, dar acelerones en frío o pasar olímpicamente de los badenes, definitivamente no eres buen conductor.
Ser buen conductor implica mucho más que no estamparse con el de delante. Cuidar de tu vehículo para que este circule a la perfección es una de las formas de ser buen conductor.
¿Sigues las normas de circulación?
En muchas ocasiones, y una vez acostumbrados a conducir (sin tener accidentes) empezamos a creer que algunas normas de seguridad vial son absurdas y dejamos de cumpliarlas.
No nos parece grave hacerlo pues creemos que la seguridad de peatones y conductores no se verá afectada pero… ¿realmente es así?
Algunas de las infracciones que empezamos a cometer por creer que no tienen importancia son:
- Salir de las rotondas por un carril que no sea el exterior. Es decir, cruzarnos desde el carril central, o peor, desde los internos.
- No poner el intermitente.
- Acaparar el carril izquierdo.
- Tomar una cervecita; sólo una.
- Pensar en uno mismo. Por prisas o por no frenar y volver a arrancar, nos saltamos los semáforos en ámbar, los cedas y los stops como el que no quiere la cosa.
- No respetar la distancia de seguridad. La verdad es que a todos nos parecía excesiva la “distancia prudencial para no colisionar” que se nos exigía en el teórico. Se nos antoja impensable que yendo “un poco más juntos” pueda pasar algo. Sin embargo, un par de sustos te harán cambiar de opinión rápidamente.
Y es que son muchos los factores que influyen en una colisión “por detrás”. Aunque tú te confíes, los reflejos pueden fallarte, puede haber algo que obstaculice tu visión, puede presentarse un problema dentro del coche (por ejemplo que entre un insecto) que te distraiga, puede que el pavimento esté sucio y el coeficiente de rozamiento sea mínimo… En definitiva, exiten mil cosas que pueden interponerse en tu camino, y agradecerás el haber respetado esa distsncia de seguridad, te lo aseguramos.
Y ya está. Para saber si eres buen conductor sólo tienes que responder estas preguntas. Si tus respuestas son síes, enhorabuena, eres un conductor excelente, así como lo son nuestros chóferes profesionales que realizan las transfers privadas en Barcelona. Si hay algún no por ahí, te animamos a que cambies tu manera de conducir para llegar a ser el mejor en la carretera.
